Acudir al registro de la propiedad. El futuro propietario de la vivienda puede acudir al Registro de la Propiedad para comprobar los datos oficiales de la vivienda como la ubicación, los metros cuadrados y si existen cargas sobre la casa. El coste del documento es de unos tres euros.
Consultar con los vecinos. Los vecinos pueden ser una fuente valiosa de información, ya que pueden informar sobre problemas en el edificio, la escalera o sobre algún vecino molesto que haya en el inmueble.
Consultar con el Ayuntamiento. El impuesto del IBI debe de estar pagado y si el propietario no quiere facilitarnos el último recibo podemos acudir al ayuntamiento para pedir dicha información.
Consultar con nuestro banco. Es de suma importancia asegurarnos que nuestro banco nos concederá la hipoteca para la casa que nos interesa, ya que si pagamos una señal al propietario y luego no nos conceden la hipoteca, el propietario se verá con el derecho de quedarse dicha señal.
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